RUINAS CASTILLO ALDEIRE 24/12/11

viernes, 19 de febrero de 2010

ADORNOS DE LA CONSTITUCION ESPAÑOLA

Muchas veces me he puesto a pensar sobre tres Artículos de la Constitución Española que no sé donde encasillarlos, si dentro de su texto o más bien sacarlos al Preámbulo de la misma, porque no estoy seguro si se redactaron para formar parte de ella o se añadieron como adornos a un vestido para que aparezca más precioso y llamativo.

Son tres Artículos tan importantes que, si se cumplieran en su integridad, los españoles gozaríamos de un bienestar envidiable, tendríamos una economía saneada y duradera y nuestros Representantes Políticos tendrían tiempo de dedicarse a redactar Leyes mas justas y no a estar enfrentados unos con otros por la enorme crisis económica que padecemos y por el número de parados existente.

Son los tres Artículos que, en los casi 32 años de Constitución, menos se han cumplido y a los que menos importancia se les ha dado.

El primero de ellos es el Artículo 14 de nuestra Constitución que dice así:

“Los españoles son iguales ante la Ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.

Viendo a diario las noticias de los diferentes medios de comunicación social no llego a comprender totalmente el contenido de este Artículo ya que es vilipendiado muy a menudo por el mal uso que de él se hace por los mismos Jueces que lo aplican con todo su rigor si se trata de frágiles eslabones y si los eslabones está cubiertos de grandes fortunas o rodeados de Poder, se ejerce una más suave justicia, a pesar de ser los mismos quienes la reparten para los unos y para los otros.

Pero qué mejor que un ejemplo para llegar a comprender íntegramente lo que está en la calle, en boca de todos, siendo una de las causas por la que la mayoría de la gente pierde su confianza en este tercer Poder del Estado que es la Justicia.

El día catorce de Febrero pasado, leí en el periódico digital de EL PAIS, un reportaje cuyo título escrito por José María Irujo es el siguiente: “Roldán sale libre con su botín. Luis Roldán cumplirá en marzo su condena de 31 años de prisión. El ex jefe de la Guardia Civil se va sin devolver nada y con la mayor parte de su botín intacto, unos 14 millones de euros. EL PAÍS revela cómo ha salvado su fortuna”.

Me quedé sorprendido porque de los 31 años a que le habían condenado sólo iba a cumplir 15 y además no devolvía la mayor parte de lo robado y que lo poco recuperado era lo que “Los jueces han logrado recaudar en el procedimiento civil 1.646.845 euros con el embargo de cuentas corrientes y la subasta de algunas de sus propiedades intervenidas en España, 6 de sus 15 pisos, una cantidad que sólo representa el 8,7% de los 19 millones de euros que adeuda al Estado”, sigue comentando el comentarista de EL PAIS.

Ante tales hechos sentí una profunda e inmensa tristeza al pensar, que la Justicia había fallado, que las Leyes que tenemos están desfasadas o que, después de casi 32 años de Constitución, nuestros Gobiernos los habían pasado por alto a pesar de se Gobernantes de diferente color.

Como en una película pasaron por mi pensamiento las personas que han estado y siguen estando en las cárceles por haberse apropiado, no de dinero para enriquecerse, sino de pequeñas cantidades de alimentos para dar de comer a su familia o de algunas prendas para vestirla. No quise pensar en la posibilidad de que algunos de los más de cuatro millones de parados se vieran abocados a recurrir a este mismo método y en lo que les espera, si los cogen, sabiendo que todo el peso de la Justicia SI recaerá sobre ellos. También me vino a la mente aquellos, que por ser jóvenes, le dan “jaque mate” a la Justicia, con mucha frecuencia, sin que ésta pueda hacerles nada.

Pero lo que me revolvió el estómago fue comprobar la gran cantidad de chorizos escondidos, bajo las siglas de todos los Partidos Políticos, para enriquecerse a costa de todos los españoles. Son pícaros y escurridizos y esperan el momento oportuno para retirarse sin que nadie se entere de sus fechorías. Estos aprovechados se encuentran repartidos por todas partes, encontrándose mayoritariamente entre aquellos que ostentan o han ostentado el Poder, como se ha comprobado en Andalucía, Cataluña, Valencia, Madrid, Baleares, entre otras Comunidades Autónomas

Después de hacerme todas estas reflexiones, en las que constato que siempre los más débiles salen condenados y los mas poderosos casi siempre absueltos, sólo me queda lanzar al aire las siguientes preguntas por si alguno de nuestros Representantes quiere hacerse eco de ellas y llevarlas al Parlamento

¿A qué esperan sus Señorías para modificar nuestro Código Penal y agregarle solamente una frase, como esta, que diga claramente: “la cárcel será el domicilio habitual de aquel que robe, (o se apropie de lo ajeno), y permanecerá en ella hasta que restituya íntegramente todo lo sustraído”? y

¿Existía algún impedimento para no haber podido añadirle ese pequeño párrafo al Código Penal que habría hecho devolver al SEÑOR LUIS ROLDAN los más de 14 millones de euros, no encontrados, aún reconociéndosele las propiedades que posee en España y en el Extranjero, según se publica en dicho reportaje del Periódico EL PAIS?.

¿Que sueldo ha ganado este Señor, por llamarlo de alguna manera, por cada día que ha permanecido en la cárcel y cuanto le ha costado, al Gobierno, a todos los españoles, por cada día que ha permanecido encerrado?

¿Cuantas personas que están en el Paro podrían haber salido de él y beneficiarse de esa escalofriante cantidad?
Personalmente sigo pensando que de no añadirle al Código Penal ese párrafo, este Artículo 14 de la Constitución seguirá siendo un adorno, igual que estos otros dos, que nunca llegarán a cumplirse, porque no existe voluntad de cumplirlos por los políticos que nos han gobernado y nos siguen gobernando.

Artículo 35-1 de la misma que dice:
“Todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libe elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo”

y continúa el Artículo 47:
“Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los Poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación”.

¿Donde está el trabajo y la vivienda prometida en la Constitución? ¿Se llegarán a ver realizados, alguna vez en la vida, estos dos Artículo en toda su integridad?

¿Se acuerdan sus Señorías del inmenso número de parados, la mayoría jóvenes que no pueden formar familia por no tener trabajo ni ingresos para adquirir una vivienda?

Creo que sólo un milagro como el de “la multiplicación de los panes y los peces” podrá llegar a que esos Artículos se hagan realidad, pero de momento seguiré esperando a que llegue ese milagro ya que está a la vista que nuestros Representantes nunca se pondrán de acuerdo y ni se unirán una sola vez para que se cumplan. Todos los días nos cuentan, por no decir nos cantan, el mismo estribillo: “Nuestra mayor preocupación son los parados, los jubilados, las viudas,....... etc.etc... y por ellos estamos haciendo un gran esfuerzo.........” ¿Esfuerzo? ¿En qué?

¡No veo a ningún político con el agua al cuello al final de mes, como se ve la mayoría de los españoles de a pié, ni he sentido nunca en las noticias que da la Televisión, que a ninguno de ellos se le haya inundado su casa! ¡Puede que sea la suerte que también los premia en esto!

sábado, 13 de febrero de 2010

DE HERENCIA: UN DESIERTO PARA EL FUTURO

Esta tarde estoy viendo nevar desde mi ventana y, una vez más, estoy descubriendo lo sabia e inteligente que es la Naturaleza y lo torpe e interesado que es el Ser Humano, cuando con todos sus medios, se empecina en destruirla.

¿Nunca ha pensado la Humanidad en la cantidad de millones de años que la Esfera Celeste lo lleva haciéndolo todo, a la perfección, sin que ni una sola estrella o planeta haya tenido el más mínimo roce o equivocación para tropezar alguna vez una con otro.

¡¡Que ejemplo tan enorme para todas las Direcciones Generales de Tráfico del mundo, llámense como se llamen en otros Países!!

Pero nosotros, nos tenemos por mucho más inteligentes. Nos hemos empeñado en dejar de herencia a nuestros hijos un desierto, un planeta llamado Tierra, totalmente desforestado, abrasado por los miles de incendios que cada año provocamos, sin hielo en los Polos, sin aves que con sus trinos nos despierten por la mañana, sin vivarachas ardillas que se nos quedan mirando fijamente, antes de atreverse a cruzar el camino, por el que, de momento, solemos hacer senderismo.

A tal estado de salvajismo estamos llegando que, hasta miles de especies animales y vegetales, se han tenido que proteger de la criminal mano del hombre, ante este tsunamis de destrucción a que ha llegado el ser humano con su egoísmo.

Nos consideramos los reyes de la naturaleza porque controlamos centrales nucleares, bombas destructivas, cohetes de largo alcance, aviones, barcos, coches, ordenadores y un sin fin de aparatos que, son sus gases de efecto invernadero, cada día van colapsando más nuestra atmósfera y quien sabe si ésta no nos los está devolviendo ya, con nuevas enfermedades, a las que no sabemos ni podemos hacerles frente.

Pero si hemos llegado a tal grado de inteligencia, ¿Cómo es posible qué Haití esté padeciendo los efectos de un terremoto que ha dejado sin hogares a miles y miles de familias, sin contar con los cientos de miles de muertos y desaparecidos? ¿Donde están esos reyes de la naturaleza para no haberse podido adelantar a anunciar su destrucción? ¿Y queremos llegar a Júpiter? ¡¡Qué insensatos somos!!

¿Por qué no podemos controlar esos ríos para que no se desborden y no lleguen a arrastran ni a sembran la muerte a lo largo de su recorrido? ¿Porque no somos capaces de ponerle unos frenos de disco al ojo de ese terrible y destructor tornado en su parte interior?

Falta mucha humildad y sobra mucha soberbia entre los considerados sabios del momento. No investigan lo suficiente para que vivamos sin enfermedades y sin pobreza. No se ponen de acuerdo para sacar de la crisis a la humanidad. Se enfrentan minuto a minuto unos a otros con la única intención de no perder el mando quienes lo ostentan y llegar a él aquellos que no lo tienen.

Me suena a ironía cuando escucho por la Televisión que en Europa se ha creado un “Consejo de Sabios”. Sabios.... ¿Para qué?.

Si alguien de los que lleguen a leer este artículo me puede contestar a esta pregunta, se lo agradeceré toda mi vida, porque quizá sea una de las pocas a la que no encuentro ni la forma ni la manera de contestármela.

martes, 9 de febrero de 2010

¡QUIENES REPARTEN LAS MEDALLAS?

Cada año, el 28 de Febrero, me quedo sonrojado,y creo que muchos andaluces, al ver como la Junta de Andalucía reparte su Medallero entre sus “Hijos más Ilustres”, que han sobresalido en cualquier actividad científica, cultural o humanitaria o entre otros que han alcanzado la gloria en sus actuaciones profesionales como cantantes, artistas, futbolistas, escritores o toreros por nombrar algunos.

Pero no quisiera volver a sonrojarme más, cada 28 de Febrero, porque espero no echar de menos, en la lista de todos estos ilustres Señores homenajeados, que no dudo lo merezcan, a alguno que su vida no haya sido tan preclara, popular o notoria como la de los anteriores, pero no por ello han dejado de ser menos andaluces merecedores de tal galardón, a mi parecer, pues son personas que, día a día, cultivan las tierras de nuestros campos; pastorean con sus rebaños nuestras montañas; trabajan en la construcción bajo este sol abrasador que nos visita en verano; exponen su vida apagando incendios forestales o urbanos y a una inmensa mayoría de madres que han criado a una docena de hijos sin tener ni una sola peseta de ayuda de la Junta ni de otro cualquier Organismo. Son padres o madres de familia que han hecho filigranas para alimentar a sus hijos, emigrando a Francia para ganarse unos francos, ahora euros extras en la vendimia o, simplemente, son temporeros, acompañados de una inseparable Cartilla de Paro, con días señalados para sellarla en la Oficina del Inem que le corresponda, haciéndoles sentirse más humillados, si es que cabe, cuando no se tiene donde trabajar. En fin, un carpintero, un albañil, un fontanero, un minero, un obrero de fábrica, un vendedor ambulante, un empleado de comercio, un oficinista, un herrero, un chapista, un pintor no de cuadros, un empleado de banca o un joyero, por cierto, muchos de estos trabajos llevan aparejada la compañía de una gran peligrosidad y sobre todo, muchos de ellos, son trabajos poco reconocidos y miles de profesiones más que existen y que podía seguir enumerando.

Todas estas personas han trabajado y siguen trabajando muy duro y durante muchos años, algunos cuarenta y muchos más, casi desde que eran niños. Por eso les pido hoy y les recuerdo, a esos Señores encargados de elegir a quien colgarle una Medalla, que es triste no se les haya pasado por el pensamiento, que de todas las que conceden, al menos, sino la mitad, algunas pocas podrían servir para distinguir a hombres y mujeres que pasaron y siguen pasando muchas calamidades y escaseces como muchas madres y padres coraje, para que los que ahora deciden quienes son los merecedores de tal distinción sepan que su actual status o bienestar social se lo deben a ellos.

Espero que el 28 de Febrero de 2010, entre la lista de Ilustres, estén incorporados algunos nombres, anónimos de sabiduría, pero de corazones tan grandes, que siempre entregaron lo mejor de su vida y ahora se conforman con la escasa paga que el Estado les da mensualmente, sin exigirle nada más. Hagámosle justicia a alguno de ellos sino podemos hacerlo con todos los merecedores, en nombre de nuestro pueblo; una distinción que alegre lo que les quede de vida, porque nunca seremos capaces de agradecerles todo el esfuerzo y trabajo realizado para que nosotros vivamos mejor.